Hoy hemos querido rendir un pequeño homenaje al otoño, una estación que parece especialmente dada a leer poemas porque se presupone durante este tiempo, un singular estado de melancolía, aunque también puede ser divertido con los claros y oscuros cambios de luz que a diario invaden nuestros días.
Fijaos
en los poemas de Gloria Fuertes, Amado Nervo, o algo más profundo de Rubésn
Darío.
"Que llueva ya", Gloria
Fuertes
Gallinas y pollitos,
que se vayan a dormir.
¡Que llueva por el monte!
¡Que llueva por aquí!
Ya está lloviendo...
y las nubes huyendo
y la bruja en camisa.
¡Ay, qué risa, tía Luisa!
"La
ardillita", (Amado Nervo)
La ardilla corre,
la ardilla vuela,
la ardilla salta
como locuela.
¿Mamá ...?
¿La ardilla no va
a la escuela?
“De otoño”, Rubén
Darío
Yo sé que hay quienes dicen: ¿Por
qué no canta ahora
con aquella locura armoniosa de
antaño?
Esos no ven la obra profunda de la
hora,
la labor del minuto y el prodigio
del año.
Yo, pobre árbol, produje, al amor
de la brisa,
cuando empecé a crecer, un vago y
dulce son.
Pasó ya el tiempo de la juvenil
sonrisa:
¡dejad al huracán mover mi corazón!
3 comentarios:
Qué bonitos poemas.
¡Al leerlos dan ganas de salir a la calle!
Aunque sinceramente, a Gloria Fuertes nunca le he encontrado "gracia" en sus poemas... Quizá sea porque no suelen tener rima.
Aída Emilia García Molina 4ºA
Bonitos poemas para este inicio de otoño. Graciosos como el de Gloria Fuertes o Amado Nervo, y melancólico como el de Darío... ¡me quedo con los tres!
Los poemas no tienen por qué tener rima, te gustan o no. Gloria Fuertes tenía su forma muy particular de escribirlos y aquí tenemos una muestra de ello.
Mª Ángeles.
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