Margaret Mitchell nació el 8 de noviembre de 1900. Esta novelista estadounidense, nació en Atlanta, la ciudad en la que se desarrolla la historia de su único libro Lo que el viento se llevó (Gone Whit The Wind), y murió, también en Atlanta, el 16 de agosto de 1949 atropellada, a la temprana edad de 49 años, junto con su marido, por un taxi que circulaba a gran velocidad.
Hija de una sufragista y un prominente abogado, desde pequeña estuvo interesada en la historia de su país, sobre todo por la Guerra de Secesión. Su padre era presidente de la Sociedad de Historia de Atlanta y su madre y su hermano también estaban interesados por los estudios históricos. No obstante, Margaret decidió estudiar Medicina.
Pero la prematura muerte de su madre, cuando Margaret apenas contaba 19 años, hizo que abandonara sus estudios y regresara a su casa para ocuparse de su padre y su hermano. Poco después inició su carrera como periodista trabajando para el Atlanta Journal y el Sunday Magazine, donde escribiría entrevistas, artículos e incluso reseñas de libros. Firmaba Peggy Mitchell y tuvo un éxito moderado.
Por esa época, 1922, se casaría con su primer marido, pero fue tan desastroso y terrible que tras muchas penalidades, este matrimonio fue anulado dos años después. En 1925 se casó con John R. March, director de publicidad de la Georgia Power Company. Más tarde, cuando una lesión de tobillo la mantuvo en casa durante un largo periodo, sería él quien la animara a escribir el que sería uno de los libros más populares y más vendidos de todos los tiempos. Tardó más de 10 años en acabarlo. Escrito de manera caótica y desordenada, los episodios se acumulaban uno tras otro según llegaba a sus manos nuevos documentos y nueva información, lo que sucedía con gran frecuencia.
Mientras tanto iba creando y desarrollando el carácter de sus protagonistas, se identificaba con ellos y vivía sus vidas. Esto fue así durante 9 años, hasta 1935, año en que el vicepresidente de la Editorial Macmillan, tuvo ocasión de conocer el trabajo y a pesar del desorden y el caos acumulado, se interesó por el libro y le impuso a la autora un tiempo límite para su terminación. Un año más tarde vería la luz su novela Lo que el viento se llevó. Su éxito fue fulminante: se vendieron millones de ejemplares y se tradujo a 30 idiomas. Incluso hubo una edición en braille.
Este éxito, su popularidad y el dinero que ganó, no cambiaron el carácter y la forma de vida de Margaret Mitchell, que siguió viviendo en su misma casa y manteniendo sus costumbres. No le gustaba ser fotografiada ni aparecer en público y mantenía una vida sencilla y normal. Contestaba personalmente a todas las cartas que recibía.
El director de cine Víctor Fleming llevaría esta historia a la gran pantalla en el año 1939. Protagonizada por Vivien Leigh, Clark Gable y Olivia de Havilland, fue nominada para 13 Óscar de los que consiguió “solamente” 8. Su enorme éxito contribuiría al de la propia novela, haciendo que fuera rápidamente conocida en el mundo entero.
Fue entonces cuando Margaret se presentó en sociedad, ya que más de una persona intentó suplantar su personalidad para poder llevarse la gloria, aunque fuera de manera efímera.
Rhett Butler y Escarlata O'Hara, o lo que es lo mismo, Clark Gable y Vivien Leigh.
2 comentarios:
He visto varias veces la película. Desconocía el final tan trágico de esta escritora.
Mª Ángeles.
Conocidísima historia de amor y desgracias en "Lo que el viento se llevó". Hoy descubrimos, además, la personalidad que hubo detrás.
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