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sábado, 7 de diciembre de 2013

De cómo éramos



DE CÓMO ÉRAMOS (10)
 Belenes

                    Esta mañana, nuestro recordatorio de años atrás, se concretará en los famosos belenes que hacíamos por los años 50 y 60, y también los 70 y 80, y aun nos atrevemos a afirmar que en muchas casas de nuestros pueblos y ciudades, por estos días, se siguen haciendo. Un breve repaso, y algunas figuritas antiguas que os recordarán al pasado. 

      Belén, la ciudad donde nació Jesús, es escenificada en multitud de hogares cada año cuando llega la Navidad en torno a un modesto pesebre.
     La reproducción del establo y del nacimiento es uno de los hitos de la Navidad. En las ciudades se suelen presentar belenes públicos, exposiciones, museos y cuentos alrededor de esta tradición navideña. Otros muchos lugares hacen concursos de belenes e incluso belenes vivientes, donde las figuras cobran vida y narran la historia de la llegada de los reyes a belén y el nacimiento del niño Jesús. 


El “belén de navidad” también es un momento para que los pequeños den rienda suelta a la creatividad, los belenes pueden hacerse de papel, con figuras y nacimientos de plástico, en arcilla personalizados o creando el pueblo, nacimiento, establo... con distintas figuras de sus juguetes habituales, distintos tipos de papel semejando el río, el cielo... Y luego distintas texturas, telas, arenas, sal... para hacer las distintas partes del belén de navidad.


Orígenes de los belenes
          Se sostiene que el primer nacimiento con figuras de barro se construyó en Nápoles a fines del siglo XV. El rey Carlos III, que hizo del nacimiento una institución nacional en Italia mientras ocupó el trono, también lo introdujo en España, fomentando que los "Belenes" se popularizaran en todo el reino itálico y español.
El Rey encargaría para su hijo, Carlos IV, "El Belén del Príncipe". El valenciano José Esteve, llegó a realizar hasta 180 figuras de medio metro de altura con destino al mencionado belén del príncipe. Los belenes de palacio llegaron a contar con casi seis mil figuras, muchas de las cuales se dispersaron, posteriormente, entre museos y otras colecciones particulares.




       En América, los frailes y monjes introdujeron esta costumbre navideña tomando los nacimientos un relevante papel.
       La costumbre de montar el belén en los hogares no se extendería hasta bien entrado el siglo XIX, con pequeñas figuras de barro de gran ingenuidad que se podían comprar en los mercadillos y tiendas, que las importaban desde tierras murcianas o granadinas.. Los belenes se convirtieron a partir de entonces en pequeños espacios festivos en torno a los cuales se reunían las familias, con pandereta o zambomba para cantar villancicos...



Figuras y escenas típicas de los belenes
        Las figuras de un "belén" pueden ser de distintos tamaños (incluso a tamaño natural) y componen las diferentes escenas y personales que se suponen protagonizaron el nacimiento de Jesús. He aquí los componentes y figuras más comunes de los Belenes:
  • El nacimiento (establo, pesebre...),
  • La anunciación del ángel a los pastores,
  • La adoración de los pastores
  • Las ofrendas al Niño Jesús de las gentes de Belén
  • Escenas de la vida cotidiana
  • Los reyes Magos en el Castillo de Herodes Los Reyes Magos guiados por una estrella hacia el portal de Belén.







                           ¡Pues eso, a montar vuestros belén!


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo quiero a los tres Reyes Magos, para que me traigan una sorpresa.
He sido muy buena.
Mª Ángeles.

Pepe (yá sabes quién) dijo...

Jamás cuando yo era niño se montó en mi casa un belén. Supongo que la tradición iba por familias. Ahora sí se monta, aunque a mí no me gustan mucho.
Los reyes éste año atraviesan zonas en guerra, vamos a ver si llegan bien. Bueno, llegarán, como son magos...