Hoy me sirvo del título de un famoso libro del italiano Italo Calvino para proponeros una lectura interesante. Se trata de un libro póstumo del escritor, Por qué leer los clásicos (1993), donde dice los siguiente:
"Los clásicos son esos libros de los cuales suele oírse decir: "Estoy releyendo..." y nunca "Estoy leyendo...". Se llama clásicos a los libros que constituyen una riqueza para quien los ha leído y amado, pero que constituyen una riqueza no menor para quien se reserva la suerte de leerlos por primera vez en las mejores condiciones para saborearlos. Los clásicos son libros que ejercen una influencia particular, ya sea cuando se imponen por inolvidables, ya sea cuando se esconden en los pliegues de la memoria mimetizándose con el inconsciente colectivo o individual. Toda relectura de un clásico es en una lectura de descubrimiento como la primera. Toda lectura de un clásico es en realidad una relectura. Un clásico es un libro que nunca termina de decir lo que tiene que decir. Es clásico lo que persiste como ruido de fondo incluso allí donde la actualidad más incompatible se impone".
Y, a propósito, de este largo preámbulo os quiero recomendar un voluminoso pero no menos interesante libro, en realidad, una novela clásica que, sin duda, algún día os vereis tentados a leer y que se titula, La Regenta, de Leopoldo Alas "Clarín", un autor que cuando terminó su obra afirmó: "Tengo la satisfacción de haber terminado a los 30 años una obra de arte". La edición de Siruela, tiene un excelente prólogo de Soledad Puértolas, una extraordinaria novelista contemporánea que afirma lo siguiente: "Con La Regenta, la literatura española deja su huella en uno de los campos más relevantes de la literatura decimonónica, el que tiene como personaje central a la casada infiel. Esta novela nos ofrece un retrato minucioso de la sociedad más conservadora de la España del siglo XIX. Su mirada crítica y profundamente moralista se conjuga con su extraordinaria capacidad de análisis psicológico. Los personajes centrales, complejos y atormentados, quedan siempre en nuestra memoria".
Madrid, Siruela, 2012; 800 págs. 19´95
En Vetusta como escenario único, Ana Ozores, infelizmente casada con el regente Víctor Quintanar, se debate entre el donjuán provinciano Álvaro Mesía y su confesor, el magistral don Fermín de Pas. A partir de este triángulo, Clarín recrea magistralmente la vida cotidiana de una ciudad de provincias del siglo XIX, el adulterio, el caciquismo, la ambición personal, el enfrentamiento entre el poder clerical y el secular...
1 comentario:
Hace bastantes años que leí La Regenta y ya, en aquel momento, me dejó totalmente embobada. Es un clásico, sin lugar a dudas, por lo tanto me quedo con esas palabras de que "un clásico nunca termina de decir lo que tiene que decir"
La volvería a leer y estoy segura de que volvería a descubrir cosas nuevas.
Mª Ángeles.
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