Situada en el desierto mexicano de Chihuahua, uno de los más extensos de América del Norte, con un área de 450.000 km².
Estas cuevas se encuentran en un paisaje propio de las películas de ciencia-ficción, con temperaturas constantes de más de 50 º C, y una humedad permanente del 100% (unas condiciones que el cuerpo humano aguanta una media hora como mucho). A lo largo de miles de años, se han formado cristales, como en muchas otras cuevas, con la salvedad de que estos son espectacularmente gigantes. No son gigantescos, sino más bien dignos de ser vistos. Como otras muchas, una más de las maravillas que nos regala nuestro planeta.
Disfrutadlas.
4 comentarios:
Mi cuerpo no aguantaría esas condiciones ni un minuto... ¡Menos mal que se puede ver así! Porque es una preciosidad, la verdad, otra maravilla de este Planeta que no sabemos cuidar como se merece.
Boquiabierta y sin palabras.
Es precioso y emocionante. ¡Debe ser fantástico estar allí! Eso si hiciera un clima mejor.
La Naturaleza me sorprende cada día más.
Aída Emilia Gracía Molina 3ºD
¡Cuantas cosas desconocemos de esa Naturaleza!
Una maravilla.
Mª Ángeles.
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