El
Viernes Santo se recuerda el vía crucis, así se llama al camino que
Jesús tuvo
que recorrer llevando sobre sus hombros el madero en el cual iba a ser
crucificado. Su muerte en la cruz y su sepultura. Constituye el núcleo central
de la Semana Santa.
La tarde del Viernes
Santo presenta el drama inmenso de la
muerte de Cristo en el Calvario. La cruz erguida sobre el mundo
sigue en pie durante siglos como signo de salvación y de esperanza.
Con la Pasión de Jesús según el Evangelio
de Juan se contempla el misterio del Crucificado, con el corazón del
discípulo Amado, de la Madre,
del soldado que le traspasó el costado.
San Juan, teólogo y cronista
de la pasión nos lleva a contemplar el misterio de la cruz de Cristo como una
solemne liturgia. Todo es digno, solemne, simbólico en su narración: cada
palabra, cada gesto. La densidad de su Evangelio se hace ahora más elocuente.
Imaginaría clásica de todos los tiempos.
1 comentario:
El Viernes Santo, en la procesión del Paso Negro, se hace las tradicionales paradas de Cristo. Procesión solemne.
Rubén Ayén Galera 1ºBHCS-B
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